Se cuenta la historia de un hermitaño que vivía solo en una cueva con su hijo de 15 años. El hijo nunca había conocido al pueblo mas cercano ni tampoco había visto a otra gente. Pero para celebrar sus 15 años su padre decidió llevarlo al pueblo para que lo conociera y para comprarle un regalo. Salieron desde la mañana y llegaron primero a la talarbarteria donde su papá le enseñó una montura. Después le llevó a la tienda de artículos deportivos y le enseñó los mejores cuchillos para la cacería.
INTRODUCCIÓN
Mientras caminaban en la calle, encontraron a una muchacha como de 15 años; el joven preguntó a su padre, "¿Qué es eso?" Su padre, tomado por sorpresa, no sabía qué contestarle, porque no quería que su hijo se interesara en una chica todavía. Entonces, rápidamente le dijo, "Es un ganso, mi hijo", y seguían caminando y viendo en las tiendas. Durante el transcurso del día el muchacho conoció perros finos, rifles y pistolas. AI fin del día el papá volteó al joven y le preguntó, "Bueno, mi hijo te he enseñado muchas cosas hoy, esto; dispuesto a comprarte lo que más te gusta Dime ¿cuál has escogido?"
Sin titubear ni por un momento, el muchacho le contestó, "Papá, cómprame un ganso".
La atracción sexual entre un joven y una señorita es tan antigua como el mundo mismo y se originó en la mente de Dios. Fue Dios quien dijo, "No es bueno que e/ hombre esté solo, le haré ayuda idónea para él". Después de formar a la mujer del mismo cuerpo de Adán, entonces Dios la trajo al hombre para que se gozaran juntos en una relación matrimonial plena. El pecado original no fue el sexo, fue su desobediencia al mandamiento de no comer del árbol. E! sexo fue creación de Dios para bendecir a la humanidad.
Tu sexualidad, joven, es un don divino, pero es un don tan delicado que te puede traer gran felicidad o te puede destruir.
Según un estudio de la revista Teenage (Juventud), 99% de los jóvenes dijeron que las relaciones sexuales antes del matrimonio es el problema número uno que enfrenta la juventud hoy en día.
Vivimos en un mundo promiscuo. El mensaje de la música moderna, de la televisión, revistas, películas, de los compañeros de la escuela y por todos lados es: "Si te sientes bien, hazlo"; o "todo el mundo lo está haciendo".
Una muchacha cristiana escribió, "Estoy cansada de oír en la televisión o leer en cualquier revista que abro:'Cuídate en tu vida sexual, señorita, procura usar anticonceptivos para evitar enfermedades o embarazos no deseados'. ¿Por qué no nos aconsejan mejor guardar et sexo para el matrimonio?"
Estoy convencido de que hay miles y miles de jóvenes cristianos, como esta señorita, que desean consejos sanos, consejos basados sobre la Palabra de Dios, y quieren que alguien les hable bien claro y directo. Por eso, estoy escribiendo este librito.
Tengo más de 30 años de estar felizmente casado y muchos años de ser un líder espiritual, observando y aconsejando a personas que están sufriendo las consecuencias de no tener su sexualidad bajo control.
¿POR QUE EL NOVIAZGO?
Muchas personas se casan y después de poco tiempo dicen, "Pues, yo no conozco a mí pareja". Entonces ¿de qué servio el noviazgo? ¿De qué platicaron? ¿Nada más • * ¡Qué chula!"; "Te adoro"; "Eres muy guapo"...etc.?
El noviazgo debe ser un tiempo para conocerse el uno al otro en un nivel mental, emocional y espiritual, pero sin llegar al nivel físico. Es un tiempo para ser amigos, para aprender a hablar, para compartir ideas, sueños y metas, para orar juntos. Pero ten mucho cuidado con los besos y caricias porque esto puede reducir tu relación a algo únicamente físico e impedir que se desarrolle en las otras áreas.
El matrimonio basado sobre pasión en vez de amor no durará, o será un "infierno en la tierra". En el área del sexo somos hechos de tal manera que si tenemos una probadita, queremos más. Un poco de acariciar el lunes, el martes queremos más, y el miércoles aun más.
El sexo es como un fuego. No es posible Jugar con fuego y no quemarse. El fuego dentro de la chimenea es maravilloso, porque da calor a toda la casa, pero sacándolo de allí, es capaz de destruir toda la casa. El sexo dentro del matrimonio es bello y maravilloso, pero fuera de allí, destruye vidas.
Yo no creo en los noviazgos ni muy cortos ni muy largos. Debe ser lo suficiente largo como para conocerse bien, pero no demasiado largo para que la tentación sexual sea un problema grande. Creo que entre un año y dos años es suficiente. Después de mucho tiempo la pareja tiene todo, menos el sexo y ¡qué frustración y tentación!
Hay un dicho: "el amor es ciego, pero el matrimonio abre los ojos". Joven, abre tus ojos ahorita, y no después, para conocer las debilidades de la otra persona. ¿Son cosas que te molestan mucho ahora? Si así es, te molestarán aun más después de la boda.
Y no pienses, señorita, '"Yo lo cambiaré" porque probablemente él no cambiará, a menos que Dios lo haga. La mujer que asume la "tarea" de cambiar a su marido por medio de "consejos" o manipulación, llegará a ser una esposa "machacadora" o "mortificadora" y su hogar se tornará en un lugar de pleitos y odio.
Si algún joven me dijera, "Pero no podemos casarnos sino hasta dentro de seis años, porque tengo que terminar mis estudios y establecerme primero en un trabajo", yo le daría este consejo: no sean novios todavía, sean amigos. Salgan a pasear y a platicar en grupos con otros jóvenes cristianos. Si esta chica es la persona que Dios tiene escogida para tí, ella te esperará, y si no es, no la quieras de manera alguna.
¿CON QUIEN Y CUANDO DEBO CASARME?
Tú, joven cristiano, no tienes el derecho de casarte con nadie que no sea cristiana. Dios dice, "No os unáis en yugo desigual con los incrédulos". (2 Co. 6:14) Ni tengas una novia no cristiana, porque el propósito del noviazgo es conocerse y decidir si esta persona es la "correcta" para el matrimonio.
Leemos lo siguiente del Rey Salomón, hijo de David; "Pero el Rey Salomón amó, además de la hija de Faraón, a muchas mujeres extranjeras...gentes de los cuales Jehová había dicho a los hijos de Israel: No os llegaréis a ellas, ni ellas se llegaran a ti vosotros; porque ciertamente harán inclinar vuestros corazones tras sus dioses. A éstas, pues, se juntó Salomón con amor. Y tuvo setecientas mujeres reinas y sus mujeres desviaron su corazón. Y cuando Salomón era ya viejo, sus mujeres indinaron su corazón tras d/oses ajenos, y su corazón no era perfecto con Jehová su Dios, como el corazón de su padre David". (I Reyes 11:1-4). En su vejez. Salomón escribió, "Vanidad, todo es vanidad". Era un viejito amargado, viendo la vida como una vanidad, porque él no supo controlar sus pasiones.
De todas maneras, el solo hecho de que la otra persona sea cristiana no basta. Hay muchos matrimonios entre cristianos que son un "infierno en la tierra". Uno siente un llamado para servir al Señor y la otra persona está contenta con sólo asistir a la iglesia los domingos; uno tiene sueños y metas grandes y la otra persona es conformista.
Sé un joven de oración y busca a Dios, confiando que El tiene la pareja idea! para tí. Salmo 37:4 promete, "Deléitate asimismo en Jehová, y é! te concederá !as peticiones de tu corazón ".
Se dice que "los opuestos se atraen", y es cierto en algunas áreas de la vida, especialmente en cuanto a nuestro temperamento. No es nada extraño que un acelerado "colérico", con carácter fuerte y cualidades de líder, se case con una mujer calmada y pacifica; que una muchacha "sanguínea", platicadora y extrovertida se enamore de un Joven quieto, "melancólico" e introvertido.
Sin embargo, cuando llega al asunto de las metas en la vida, las convicciones espirituales, los intereses, el nivel educativo y nivel socio-económico, cuanto más tengan en común, más posibilidad habrá de tener felicidad y armonía en el matrimonio.
De vez en cuando un joven cristiano me pregunta, "Y cómo voy a saber quién es la muchacha que Dios tiene para mi?" Yo le respondo, "Te vas a enamorar de ella y además tendrás la confirmación de Dios en tu espíritu". Si eres una persona de oración, puedes esperar que el Señor revele su voluntad perfecta para tu vida pero no en una manera mística. Esta revelación viene a través del amor genuino hacia la otra persona, la paz de Dios en tu corazón y por los consejos de otros cristianos maduros.
Aunque somos espirituales, no creo que Dios pase por alto los sentimientos humanos y naturales del amor.
Yo sé que el Señor me dio como esposa a Gloria, pero también fue un proceso natural. Me enamoré locamente de ella. No recomiendo a nadie que se case mientras no esté enamorado de la otra persona, aun si dijere, "Dios me mostró que Fulana va a ser mi esposa". Yo he oído de tales casos y algunas veces "Fulana" no estaba convencida. Si Dios te lo mostró, entonces empieza a cultivar una relación de amistad con ella, y si es de Dios, los dos se enamorarán.
Si no hay muchos jóvenes cristianos en tu iglesia, no te desesperes, sino ponte a orar y a tomar pasos prácticos para que Dios te pueda contestar. Yo vengo de un pueblito pequeño en el Estado de Pennsylvania, y Gloria vivía como 3,000 kilómetros de distancia en el Estado de Missouri; por una "coincidencia"...planeada por Dios...los dos nos encontrábamos en una conferencia cristiana en una iglesia pequeña en otro Estado. Ella había orado por un esposo cristiano con deseos de servir al Señor; yo había pedido a Dios una esposa cristiana. Ya que no había en nuestras congregaciones locales la respuesta a esas oraciones. Dios hizo el "milagro" de que nos conociéramos a miles de kilómetros de nuestras casas.
Mi yerno tiene un testimonio bello en esta área. El tenia casi 28 años de edad cuando se casó con mi hija, porque él había esperado la mujer que Dios tenia para él. Su mamá se desesperaba y por varios años le aconsejaba que ya era tiempo de conseguir una novia. El siempre respondía, "No, Mama, no tengo que buscar una novia. Cuando encuentre la mujer que Dios me está preparando, yo sabré". Y así sucedió. Cuando él y Sheri, mi hija, se conocieron (lejos de las casas de ambos), los dos sabían que esto era la voluntad de Dios y su amor mutuo lo confirmaba.